La mayor parte de las actividades culturales realizadas en barrios o comunidades del país están dirigidas a un público adulto y aún cuando en estos últimos años se han incrementado las propuestas planteadas a la audiencia infantil y juvenil, dichas actividades culturales y de recreación no han tomado en cuenta la proyección de material audiovisual y cinematográfico, que son una expresión artística y herramienta educativa que genera interés en todos los grupos etarios, y crea una dinámica de socialización, participación y diálogo familiar y comunitario. Frente a esta perspectiva, la Fundación Chulpicine ha implementado durante 19 años festivales y muestras de cine infantil y juvenil, que además de crear espacios de encuentro y recreación, es una propuesta educativa que contribuye a democratizar la cultura, llevando cine diferente y de calidad a todos los rincones del país.